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Las nuevas instalaciones, situadas en Santa María, permitirán mejorar los tratamientos y la detección precoz. Inversión de un millón de euros, financiada por la Diputación

E.H.

La unidad de trastornos cognitivos de Lleida, ubicada en el Hospital de Santa María, inauguró ayer las nuevas instalaciones, mucho más amplias, y que permitirán mejorar tanto los tratamientos no farmacológicos a pacientes con demencias en su hospital de día, como la detección precoz de enfermedades como el Alzheimer. "Podremos mejorar las terapias para estimular la memoria, la atención y la comprensión de los pacientes y las de fisioterapia, para intentar que ya que no tenemos cuidado menos pierdan lo menos posible", destacó Gerard Piñol, coordinador de esta unidad.

También dispondrán de espacio para punciones lumbares para encontrar biomarcadores para detectar mejor la enfermedad antes de que se desarrolle.

Las nuevas instalaciones, que ocupan el espacio donde vivía una comunidad religiosa de monjas, también permitirán atender con más comodidad a los pacientes, una de sus principales reivindicaciones, destacó el delegado de Salud, José Pifarré. Esta unidad da servicio a toda la región sanitaria de Lleida y del Pirineo. Atiende 600 nuevos casos cada año y lleva a cabo el  seguimiento de unos 4.000, en diferentes fases. La prevalencia de las demencias, que es apenas del 1 o el 2% a los 60 años, llega al 10% a los 75 y el 40% a los 90, destacó Piñol.

La mejora de esta unidad ha sido posible gracias a una inversión de 982.825 euros de la Diputación. Su presidente, Joan Reñé, destacó que el ámbito sanitario es uno de los que priorizan en esta época de restricciones presupuestarias. En total, la Diputación dedica a diferentes programas 17 millones de euros.



Segre, 26 de julio de 2013