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Salud prevé que un tercio de las consultas al médico de cabecera sean 'on line' o telefónicas.
Para incrementar el tiempo que dedican a cada paciente presencial y evitar desplazamientos para visitas rutinarias. Los CAP de Cappont y Ferran, pioneros en estos nuevos modelos de asistencia
M. MARTÍNEZ
Salud quiere que un tercio de las consultas de atención primaria se hagan de forma virtual (a través de e-mails o de las redes sociales) o telefónica, para aumentar el tiempo que los médicos puedan dedicar a cada paciente presencial y evitar desplazamientos innecesarios de los usuarios en los centros de atención primaria. Eugeni Paredes, responsable de Primaria en Lleida, explicó que estos nuevos modelos de atención, que se están implantando progresivamente en todos los CAP de Lleida, se utilizan para las visitas más rutinarias, por ejemplo, para dar resultados de pruebas complementarias o análisis, o hacer cambios de medicación. "Actualmente, un facultativo ve entre 28 y 30 pacientes al día y lo óptimo sería que atendiera un máximo de 22 y los dedicara entre 10 y 15 minutos por consulta", señaló. Paredes añadió que en Estados Unidos y en muchos países europeos, aproximadamente la mitad de las consultas ya no son presenciales.
CAP pioneros. Paredes recordó que en Lleida, los centros de atención primaria de Cappont y de Rambla Ferran son pioneros en trabajar con estos nuevos modelos assistencials .Al CAP de Cappont, el personal ya atiende a un 40% de las consultas por teléfono, mientras que el CAP de Rambla Ferran impulsó la iniciativa que permite que los pacientes reciban su plan de medicación por e-mail. "En rambla Ferran también están intentando poner en marcha las consultas a través de Skype, además de ser muy activos en redes sociales como Facebook i Twitter ", señaló Paredes.
Según las últimas cifras disponibles, en 2011, las visitas presenciales en los centros de atención primaria catalanes disminuyeron un 4,7% respecto al año anterior.
Así, las cifras de las consultas por teléfono de medicina de familia y de atención a la salud sexual y reproductiva mostraron un incremento superior al 90% respecto a 2010.